El creador de las series SWWEEET y Yoiko no Mokushirov, fue encontrado en su departamento colgado en su baño en Tokyo. El cuerpo tenía un avanzado estado de descomposición, presuntamente estaba muerto desde el 9 de octubre. En la escena no había rastros de combate, por lo que la policía no descarta el suicidio. En su última entrada en la popular red social Twitter, escribió:
"Bueno, tengo mucho que hacer, y cosas que había soñado, pero difícilmente tengo algún "arrepentimiento". Estoy contento con los 32 años que tengo."
De acuerdo a las investigaciones, la casa editorial Kodansha no había podido contactar al mangaka desde hace unos días. La casa editorial permanece hermética en cuanto a dar declaraciones
